"Crónicas de un corresponsal de guerra burgués"
Prólogo
Cuando RATM, se hizo conocido, lo hizo gracias a la capacidad de canalizar la rabia de una generación que comenzaba a asquearse de la mamonería cursi-depresiva del tipo me-odio-a-mi-mismo-y-me-quiero-morir en que cayeron alguna bandas del movimiento encasillado como “Grunge”. Si a eso le sumamos la
semilla del descontento de las minorías, de cualquier tipo, por la depredación y autoritarismo sin límites impuesta por el capitalismo y sus líderes, el mundo era terreno fértil para una banda que expreso con rabia lo que ya muchos sentían. El background personal de sus integrantes lo permitía y les daba credibilidad; Zach de la Rocha y Tom Morello son gallos cabezones en distintas áreas de conocimiento en temas sociales. Musicalmente hablando también tenían lo suyo: unas letras con contenido social, un fraseo insuperable, una guitarra que rompió con los canones del Rock tradicional y un bajo y una batería de igual potencia. Con toda esas cualidades lograron éxitos que marcaron a una generación entera, ya sea por moda o por identificación con el “discurso” de la banda (musical o social). Mucha agua paso bajo el puente, las disputas internas hicieron que se separaran y cada uno siguiera por su lado. Zach de la Rocha cultivo su activismo político, vivió en Chiapas en medio del conflicto y hasta vino a surfear a Chile. Mientras Tom Morello y los otros disfrutaban del glamour juntándose con Chriss Cornell en AudioSlave. Vaya a saber uno por que, porque se les acabo la plata, por nostalgia, etc. pero el 2007 se juntaron y empezaron a girar por el nuevo mundo, un mundo post crisis económicas varias (asiática, subprime, etc.) un mundo que siguió girando con sus mismos vicios, disfrazados, pero que siguió girando al fin y al cabo. Es así pequeñines, que estos nuevos RATM aterrizaron en chilito, sueño cumplido para los que nos quedamos con el molde hecho el ’97 cuando Zach se lesiono el tobillo y canceló la pasada por Sudamérica. Claro esta que las condiciones son otras, quizás la conciencia siga pero el hecho de viajar en tu propio Jet y alojarte en el Ritz Carlton demuestran que mucha Rabia Contra El Sistema no te queda posom… El concierto
Fecha: Lunes 11 de Octubre de 2010
Lugar: Estadio Bicentenario de la Florida
La verdad es que no se por que chucha, pero no estaba tan caliente por ir a verlos, quizás por lo expuesto en el prologo y esa sensación de que “ya nada es lo mismo” o por mi creciente burguesía; el asunto es que me regalaron 2 entradas y partí. Llegue a eso de las 20:00, Suicidal Tendencies ya había tocado (me lo perdí) y la entrada fue de lo mas tranquila. Tenía cancha general la cual ya estaba ¾ llena, un par de amigos estaban en palco con full auspicio así que trate de localizarlos para intentar colarme pero no se pudo, así que fuimos a cachar la mano en “Andes”. Le preguntamos al control si con la entrada de cancha podíamos pasar a Andes y nos dijo que si. Así que la hicimos de oro. Quedamos en el primer sector de andes justo a la altura donde se dividen las canchas por lo que pudimos ser testigos privilegiados del show, pero no del show que se presentaba en el escenario…
La famosa Cancha VIP
Lo de cancha VIP, o Rock Area como le pusieron ahora, no es nuevo, ni pasa acá en chile nomás. Fue una lógica reacción del mercado ante dos hechos fundamentales: a) Los sellos y las bandas ya no se hacen millonarios vendiendo discos por que ya nadie compra discos y b) existe un cúmulo de gente que por ABC motivo esta dispuesta a pagar un ojo de la cara por lo que antes era privilegio de los mas aperrados: estar a escasos metros de tu banda favorita. Así que obvio; por que vender barato algo que podemos vender caro? y pum! nace la cancha VIP. El público de esa cancha no es el típico público de cancha, esos quedan relegados a la cancha general, el público de la cancha VIP es generalmente más rubiecito y más limpiecito, andan lucidos y disfrutan del espectáculo sin transpirar demasiado. Mucho se escribe y opina puteando a los cuicos que compran esa entrada y que no se lo merecen y que la cancha es para los roqueros de verdad y asdf, pero primero que todo, conozco a un par de gente que no son para nada cuicos ni les sobra la plata pero igual compran VIP de puro fanáticos. Segundo que todo, antes para quedar en primera fila de cancha tenías que amanecerte en el estadio sobajearte con medio mundo, pasar hambre, sed, correr como orate cuando abrían las puertas y aguantar mínimo cuatro horas de empujones, escupos, proyectiles varios y toqueteos a mansalva antes de que saliera tu banda, entonces: si te ofrecen un precio a pagar por evitar todo eso y tienes la plata para pagar ese precio; no lo pagarías? El problema surge cuando la masa relegada a sectores secundarios por insolvencia económica es una masa a la que poco y nada le importa las reglas y/o cagarse al prójimo, por que pasarte a una ubicación que no te corresponde no es cagarse al sistema ni a la banda ni a la productora: es cagarte a alguien como tu, que pago el doble que tu, por un privilegio que a ti te vale un carajo obtener a la fuerza.
La batalla de Santiago
En el escenario estaban The Mars Volta, pero eran como un chancho en misa, na que ver. Su música era como música de ascensor para gran parte del respetable, la cancha VIP eran unos mil perejiles que con suerte agitaban sus blondas cabelleras al ritmo de las sicodélicas melodías. El resto nos entretuvimos mirando el espectáculo limítrofe. El limite que divide las dos canchas es un pasillo de unos 2 metros, con triple protección de valla papales y un contigente de guardias de casacas fosforescentes encargado de sacar a los que no soportan la presión de estar en primera fila y de comerse los pollos y tallas varias que el selecto publico se encarga de regalarles. De cuando en cuando uno que otro vivaracho aprovecha que el guardia esta pajareando o salio con un herido de guerra para intentar cruzar la frontera. Los 5 primeros valientes son reducidos y conminados a salir con mayor o menor uso de violencia. Cuando el primer guerrero lo logra, el resto del publico lo celebró abiertamente lo cual sería un aliciente para las hordas ávidas de trasgresión; más y más guerreros se atrevieron con dispar suerte, unos pasaban otros caían. Cuando ya unos cuantos hubieron pasado, el ataque se produjo por los 2 flancos, los que se habían pasado a cancha VIP empezaron a botar las rejas desde la retaguardia, acción que distraía a los guardias y posibilitaba que mas soldados de infantería atravesaran la trinchera y conquistara el emplazamiento enemigo, lugar que una vez conquistado no opuso resistencia, su ejercito eran ellos mismos, por lo que levantaron sus pañuelos de seda blanca en el acto, anunciando su rendición. En la línea de batalla se brindaban combates cuerpo a cuerpo memorables; el "mono Ale", uno de los lideres positivos de “Los de Abajo”, era quizás el único integrante del ejercito defensor acostumbrado a estas lides y se enfrento con uno de los invasores a puñetazo limpio, propinadole una de las sartas de combos más memorables que he visto, un combo del invasor fue respondido por una metralleta de como 20 combos al hilo por parte del barrista-guardia. No-ta-ble.
Pero la contienda era desigual, que podían hacer 50 guardias de mentira contra 20 mil jugosos ávidos de usurpar un territorio que les pertenecía por derechos ancestrales según su punto de vista? NADA.
Terminaba Mars Volta y la defensa claudicaba por el flanco derecho. Adiós vallas papales y que se pasen los que quieran.
Rage Against The Machine
Según leí por ahí, los 40 minutos de pausa entre The Mars Volta y RATM fueron a la espera de que se calmaran los ánimos, pero me parece raro ya que en Brasil fue el mismo Zach el que alentó a invadir la cancha VIP, pero en fin...
Luces fuera y la estrella roja
brillando furiosa en las tres pantallas, la sirena anunciaba el bombardeo inminente y así no mas fué. 15 poderosas bombas de chorrocientos mil megatones caían una tras otra sobre una multitud enardecida como nunca antes había visto, la sensación de que el estadio se venia abajo invadía mi, por primera vez en un concierto, lúcida mente, pero fue más el éxtasis y me entregué al goce que me transportó directo a aquellos tiempos en que nada importaba y todo valía, añoré estar en ese territorio conquistado por la fuerza, en el mosh que giraba descontrolado al rededor de las bengalas pero feliz de estar ahí, donde debía estar, contemplando la batalla desde lugar seguro. El set list fue perfecto, es un asunto personal decir que falto esta o esta otra, o que fue muy corto; para mi fue demasiado corto y personalmente extrañe cosas del “Renegades…” o el bajo imponente de la intro de “Take the power back” pero en vez de llorar por lo que no tuve, me regocijo con lo que recibí; un bombardeo del mejor rock que haya arrasado con Santiago (Auspiciado por la Guatona Tetona)
SET LIST
1. Testify
2. Bombtrack
3. People Of The Sun
4. Know Your Enemy
5. Bulls On Parade
6. Township Rebellion
7. Down Rodeo
8. Bullet In The Head
9. Calm Like A Bomb
10. Sleep Now In The Fire
11. Guerrilla Radio
12. Wake Up
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13. Canción del minero (Víctor Jara)
14. Freedom
15. Killing In The Name
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